En las últimas décadas, han sido ágiles e impetuosas las transformaciones sociales y profesionales que han modificado el ejercicio de la producción audiovisual, como consecuencia de ello, han proliferado otras formas de interacción que han permitido el desarrollo de nuevas maneras de crear y acceder a contenidos audiovisuales. Las redes sociales y el internet han permitido que las marcas y los contenidos tengan una difusión más acelerada y eficiente, no solo a nivel nacional, sino también a nivel global, pues la interconectividad desdibuja las fronteras físicas y crea un nuevo espacio para que los usuarios habiten desde la virtualidad, esto hace que las posibilidades de acceder a la información, aumenten, sin embargo, los creadores de contenido deben ser conscientes de la influencia que pueden tener sus productos en el público, pues a partir de ahí se forman ideales y pensamientos. Por esta razón, la productora audiovisual Ramonas, es consciente de la responsabilidad social que se debe tener en cada proyecto, ya que la intención de generar impacto a nivel cultural trae consigo muchos compromisos, reflexiones y cuestionamientos que van formando al espectador y le permiten repensar la sociedad que habita desde una mirada distinta y crítica frente a las situaciones, comentarios, desconocimiento, labores y estereotipos que afectan a la mujer y su papel en la sociedad. Partiendo de lo anterior, la empresa está en función de la realidad y la voz de las mujeres, la visibilización de su trabajo, la generación de redes de apoyo, más oportunidades laborales y de autoconocimiento que aporten al progreso como género y como industria. Finalmente, como sociedad es indispensable deconstruir los estereotipos e imaginarios que existen alrededor de las mujeres, es necesario dar un alto en el camino y liberarlas de las cargas culturales que esto conlleva, pues las luchas diarias les han permitido vivir, ahora mucho más que antes, en una sociedad que camina hacia la transformación