La dirección estratégica es la disciplina que abarca planeaciones estratégicas basadas en el diagnóstico realizado a partir de una matriz DOFA, de igual forma permite la prevención más que la reacción; esto se logra después de analizar los resultados, evaluando cada situación, siendo posible crear estrategias de mercadeo, de operación y satisfacción para clientes y accionistas. La dirección estratégica no solamente guarda estrecha relación con la dirección organizacional, sino que se plantea que es parte de ella, ocupándose de la determinación de la estrategia y su puesta en marcha. Surge como consecuencia del desarrollo de organizaciones y la velocidad del cambio en el entorno, alcanzando una importancia tal que es muy difícil subsistir si no se emplea como instrumento central de trabajo una dirección estratégica adecuada. El sistema de indicadores de gestión es un elemento de control conformado por los mecanismos necesarios para la evaluación de la gestión en todas las organizaciones. Éstos permiten establecer el grado de logro o el avance de los objetivos trazados y de los resultados esperados del proceso en relación con los bienes o servicios que se generan. los indicadores de gestión permiten la obtención de una información objetiva, representada cuantitativamente a través de unos registros, unos procesos y unos resultados con los cuales la organización puede medir, avanzar, retroceder o revaluar los logros a los que tienen planeado llegar. Para terminar el TPM como estrategia, se orienta a crear un sistema corporativo que maximiza la eficiencia de todo el sistema productivo, estableciendo un sistema que previene las pérdidas en todas las operaciones de la organización. Esto incluye "cero accidentes, cero defectos y cero fallos" en todo el ciclo de vida del sistema productivo. Se aplica en todos los sectores, incluyendo producción, desarrollo y departamentos administrativos.